Revisando las fotos de la fiesta de Navidad del cole y en la que tuvimos una mañana llenita de actividades:
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Aparece esta foto, que no puede mas que abrir una gran sonrisa llena de cariño…
…y es que nuestro cole está lleno de princesas, que se ponen de gala en cada fiesta.
!Ay los zapatos! …
Por ellos podrás reconocer a muchos personajes en los cuentos: los zuecos de la Lechera, el zapatito de cristal de Cenicienta, las babuchas de Aladino, las botas de siete leguas del ogro de Pulgarcito, las zapatillas rojas de Karen, los zapatos viajeros de Mara…
Por los zapatos recordarás muchos momentos: los zapatos Gorila (con pelota verde incluída) de cuando ibas a la escuela, los tacones de tu madre, las deseadas zapatillas de estar en casa, las deportivas molonas y si son con luces intermitentes «nitecuento» (como las de Chocolata), el sonido de las chanclas del verano, las aventureras katiuskas…
Y es que los zapatos producen fascinación. Tal vez provoquen imaginación porque en el fondo soñamos ser otros con ellos puestos, o que nos lleven volando a cualquier lugar lejano.
Hay muchas historias en las que los zapatos son protagonistas, así que, en homenaje a nuestras princesas, aquí dejamos una bonita selección:
Y además, nos encanta la danza de los panes que Charles Chaplin hizo en La quimera del oro.
¡Qué post tan bonito!. Solo en muy contadas ocasiones podemos apreciar la ternura en lo que leemos, y esta es una de ellas. Creo que denota una pasión por tu trabajo envidiable. No lo dejes nunca.
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