Adivinanzas. Juegos con enigmas.

Adivinanzas. Prólogo y selección de María Valverde y editado por José J. de Olañeta.

Si hay un juego desde antiguo con las palabras, éste es el de las adivinanzas.

Y este libro nos trae un saborcillo de antaño lleno de ilustraciones en forma de mariquitas, que también formaban parte de los juegos de otras épocas y motivo de colecciones.

 La adivinanza es un objeto verbal fruto del ingenio del que la crea y que pone a prueba el ingenio del que la escucha.

Esta creatividad del lenguaje, expresada en forma de metáforas, imágenes, juegos de palabras y toda clase de figuras retóricas, y que tiene su manifestación por excelencia en la poesía, la hallamos también en la adivinanzas y otros juegos verbales. Las adivinanzas y la poesía están emparentadas, tienen en común el decir las cosas de modo indirecto, figurado, metafórico, a veces con una relación muy tenue entre las palabras y el objeto que significan. (María Valverde)

En este libro encontrarás muchas y curiosas adivinanzas relacionadas con fenómenos atmósfericos, oficios, el cuerpo humano, objetos y otras de temas variados.

 

¿Y dónde colocamos estos libros en la biblioteca escolar?

Tenemos una sección en la biblioteca escolar, «Con rima» , en donde ubicamos los libros de poemas, cuentos rimados, adivinanzas, trabalenguas, refranes… y todos llevan en el tejuelo la letra P.

Nos resulta así más fácil, cómodo y operativo, buscar y colocar los fondos.

• Os contamos un juego con adivinanzas muy divertido que hacemos en clase y en sesiones de lectura.

En esta ocasión lo hicimos con el libro Mi amor tiene orejitas bailonas  y rosadas que tanto les gusta a los niños, pero claro, puedes hacerlo con cualquier otro que te guste.

• Escaneas e imprimes, o dibujas, la solución de la adivinanza.

 

• En un papel, escribes la definición de la adivinanza. Si plastificas todo, quedará perfecto y te durará casi para siempre.

 

• Une con una cinta o cordón, cada adivinanza a su solución.

• En una bolsa, introduces todos los dibujos y sólo dejas fuera las propuestas de las adivinanzas.

 

• Cada niño lee una adivinanza y después debe averiguar la solución. ¿Habrá acertado? Sólo tendrá que tirar de la cinta para comprobarlo.

 

• ¿Y si ahora jugamos al revés? ¿Podrías definir el dibujo sin nombrarlo para que los demás lo adivinen?

En la sección «Con rima» de la biblioteca escolar, podéis tener también varios de estos juegos realizados en las sesiones de lecturas.

 

Este juego también lo hemos visto con objetos al final del cordón, en vez de dibujos.

Lo cierto es que las variantes pueden ser muchas, y que las adivinanzas nos encantan a todos y llevan metido el juego en la tinta de las palabras.

Los chicos sólo necesitan que les animemos un poco 😉