Lo que tiene la primavera es que todo en la naturaleza se transforma: un torrente de nuevos colores, sonidos, luces y seres se hacen presentes. Y todo esto se anuncia muy poético.
Transformación y sentidos. Así es la naturaleza en cada estación. Así de poética y bella se presenta esta metamorfosis en una delicia de libro y singular lectura.
Una propuesta editorial rompedora, diferente y sutil.
Una perfecta inspiración para la imaginación y la creatividad.
Un jardín
Ilustraciones de Isidro Ferrer
Textos de Maria José Ferrada
Editorial A buen paso, 2016
Nada más tener el libro en las manos, intuyes que guarda algo especial. Y no defrauda.
El formato ya es una sorpresa. Se trata de un libro desplegable en horizontal y hacia la izquierda, en el que de manera ingeniosa se presentan texto e ilustración en una perfecta coreografía.
Nos va mostrando poco a poco un escenario de naturaleza en el que van apareciendo ramas, hojas, flores, y animales como el zorro, el ciervo, la rana o un conejo salpicados de viento, de lluvia, sol y estrellas.
Nos sumergimos en la naturaleza. Un jardín.
El texto es breve, muy poético y sugerente. Transmite las sensaciones y emociones de quien contempla con sus sentidos un lugar natural muy lejano a cualquier ruido humano o artificioso. Seguro que lo reconoces.
Un texto muy estético y simbólico en el que el lector deberá hacer su propia interpretación de lo que realmente sucede en el jardín, de los deseos del señor Wakagi y de una metamorfosis final.
Por las mañanas el señor Wakagi
era solo un señor.
Pero por las noches
era todos los seres
que habitaban su sueño.
El libro te atrapa la mirada porque aunque la ilustración va asomándose en cada vuelta de ¿página?,¿solapa?… el resultado final es una única imagen mural de un paisaje, que tintado de grises azules, grises marrones y magentas, dan ganas de pincharlo en la pared, extenderlo sobre la mesa, cerrarlo y abrirlo de nuevo, tocar con los dedos todo lo que aparece… Tocarlo. Eso, tocarlo. Un sentido más.
No quiero perder la oportunidad de inventar otros textos para el libro porque el formato se presta a ello. Seguro que los niños crean nuevas historias para esta ilustración tan narrativa y sugerente. Será una manera de poner en práctica nuestra imaginación y nuestros recursos lingüísticos sobre la escritura.
No quiero perder la oportunidad de inventar nuevos libros con este formato. Despleglables horizontales o verticales. Ya tengo varios poemas en la cabeza que le van como anillo al dedo, algún abecedario loco y un tema de investigación e informativo que quedará curioso.
Un jardín. Genial.
2 respuestas hasta “Un jardín. Isidro Ferrer y Maria José Ferrada”