Cuento de Otoño. Cuento de Invierno. Jill Barklem

28 Mar

Dejo libros por rincones de la casa como reclamos de lectura para todos. Son como canciones que al pasar a su lado tararean una musiquilla a la que a veces no puedes resistirte y entras en acción para escucharla hasta el final.

Voy cambiándolos para no dejar de despertar curiosidades, y ahora que llega la primavera, como al hacer el cambio de armario, recojo algunos libros que han sido una delicia para dejar paso a otros.

Los libros de Jill Barklem son inolvidables y hasta los abrazo al dejarlos en su nueva estantería. Estoy segura que sus imágenes e historias perduran en la memoria de la infancia si has entrado en ellos.

Imagen relacionada

Jill Barklem, Gillian Gaze que así se llamaba realmente, escritora e ilustradora infantil ( 23 de mayo de 1951- 15 de noviembre de 2017), ha convertido sus libros en clásicos de la literatura infantil inglesa. La exquisited de sus historias, sus maravillosas ilustraciones y la calided que transmiten las aventuras, han despertado en los lectores de todas la edades y de cualquier lugar del mundo, el amor por ellas

Jill nació en Epping, Essex, una ciudad protegida de la expansión urbana de Londres por un antiguo bosque, el Bosque de Epping. Desde niña, a Jill siempre le gustaba estar cerca de la naturaleza y pasaba gran parte de su tiempo al final del jardín observando a todos los bichitos.

Con trece años tuvo un desprendimiento de retina que le mantuvo alejada del deporte y pasaba las tardes en la sala de arte u hojeando libros en la biblioteca. Jill encontró un gran placer en dibujar flores y ramitas, y pronto decidió estudiar ilustración en la St Martin’s School of Art de Londres.

El camino que hacía cada día de casa a la Escuela de Arte en los años 70, era un trayecto de metro oscuro, bullicioso y abigarrado de gente, lo que le condujo a ocupar ese tiempo de viaje encerrada en su interior, ideando y construyendo un mundo de ratones en una maravillosa naturaleza.

Así se convirtió gradualmente su fantasía en lo que hoy conocemos como Brambly Hedge, o El Seto de las Zarzas.

Resultado de imagen de ilustraciones de Jill Barklem

 

El increíble detalle de su trabajo pronto llamó la atención de los editores de Harper Collins que con la ayuda de una de las editoras, la autora conformó las historias que sucederían en El Seto de las Zarzas.

Cuando se publicaron los primeros cuatro libros en 1980, los Cuentos de Primavera, Verano, Otoño e Invierno, el Sunday Times Magazine los describió como «la fantasía más repleta de investigación que se haya presentado antes a los niños pequeños«.

El éxito de los primeros cuatro libros fue seguido por The Secret Staircase en 1983, The High Hills en 1986, Sea Story en 1990, Poppy Babies en 1994 y A Year in Brambly Hedge en 2010.

Todos los títulos fueron adaptados para televisión.

 El Seto de las Zarzas, Brambly Hedge, es un lugar idílico de la campiña inglesa, de una naturaleza desbordante y en donde habitan, entre las raíces y en los troncos de los árboles, una comunidad de ratones de campo.

El espíritu comunitario, la cocina de temporada y la sostenibilidad, son quizás los aspectos más relevantes en las relaciones de los personajes de estas historias.

Es además un lugar seguro donde las personas son agradables, se ayudan, comparten fiestas o preparan juntos el almacén de comida. Pequeños y ancianos están atendidos por todos, y los adultos se encargan de organizar la vida diaria.

Imagen relacionada

Los ratones forman una sociedad muy unida porque deben protegerse y cuidarse (solos no sobrevivirían).  Todo tiene un ambiente de calma y de control, de tradiciones mantenidas y de cierto conservadurismo entre los habitantes. Cada familia tiene su casa preparada y comparten el Almacén del Tronco, en el que guardan frutas, bayas y frutos secos para dejarlos secar o preparar conservas para los meses de invierno.

Seguramente que los personajes y su entorno nos recuerdan a la maravillosa Beatrix Potter, y también a Alison Uttley, escritoras e ilustradoras también inglesas. Y es que tienen mucho en común.

Las ropas que usan los ratones están minuciosamente dibujadas y colocadas con detalle a cada personaje, como si fueran personitas.También su comportamiento está muy humanizado, por lo que en muchas situaciones el lector no tiene dificultad para hacer inferencias en su propia vida o entorno, con respecto a la historia.

La autora tenía un interés especial por las costumbres y artesanías rurales que se plasmaron claramente en sus escenarios con asombrosos detalles ilustrativos: molinos de agua, alacenas para conservas que se procesaban manualmente, el aprovechamiento del aire y la energía del agua, las ceremonias y celebraciones que marcaban los momentos decisivos del año.

Cada uno de sus libros tardaba en producirlos alrededor de dos años porque cada ilustración estaba estudiada y trabajada al detalle, así que podrás imaginar que las ilustraciones grandes, podrían llevarle hasta tres meses de trabajo.

 

Otro de los aspectos maravillosos de sus libros es la naturaleza tan inmensa y tan cercana.

Es cierto que el punto de vista del lector es habitualmente el de un dimunto ratón, por lo que todo parece desbordante. Y así es tan bonito percibir las frutas, las hojas, las ramas… tan bien dibujadas, que parece como si olieses el aroma de las manzanas al fuego, o si te despeinase el viento del atardecer, o te asustara el crujir de las hojas.

Usando cada una de las estaciones como fondo de una historia sencilla: un picnic de cumpleaños en la primavera, una boda de verano, una cosecha de otoño y una celebración de un festival de invierno, las historias celebran el mundo natural y animan a los lectores a que lo noten.

 

One of Jill Barklem's 'Brambly Hedge' illustrations. Her intricate cross-sections of trees inhabited...

 

Jill utilizó el color en sus ilustraciones con destreza para reflejar nuevos estados de ánimo a medida que cambian las estaciones. El clima y la luz se reflejan vívidamente, al igual que los colores evocadores de las estaciones: colores otoñales ricos y cálidos, y tonos más claros y frescos para la primavera.

Jill se sumergió en el mundo que ella creó. Estaba absorta en los detalles más pequeños de todo, desde la flor de un árbol hasta los dientes de una máquina. Su estudio y su cocina estaban llenos de flores secas, conchas, nueces, plumas, cualquier cosa y todo lo que pudiera recoger y usar para inspirar el mundo de Brambly Hedge.

En el año 2010 la editorial española Noguer publicó todos los cuentos (ocho en total) juntos en una cuidada edición de mayor tamaño en la que las ilustraciones son espectaculares.

Ahora, podemos disfrutar de los cuatro primeros cuentos de la mano de la Editorial Blackie Books.

Cuentos de Otoño, Invierno, Primavera y Verano

Jill Barklem

Editorial Blackie Books, 2018

  • He leído y expuesto información sobre la autora de:

The Guardian

Brambly Hedge

Jill Barklem, the creator of the 'Brambly Hedge'

  • Este es el mapa del Seto de las Zarzas, que aparece en las guardas del libro.

En este pequeño territorio hay un enorme mundo repleto de vida y lleno de pequeñas historias que no podrás olvidar, del que disfrutarás, y te ayudará a conocer el mundo un poco más.

 

seto-zarzas

2 respuestas hasta “Cuento de Otoño. Cuento de Invierno. Jill Barklem”

  1. Mireya abril 3, 2019 a 5:02 pm #

    ¡Oh, qué preciosidad de ilustraciones! No me extraña que tardase tanto en terminarlas, parecen tener muchos detalles. Ahora muero de ganas de leer los cuentos, los buscaré en mi biblioteca para poder hacerlo y te contaré.

    Me gusta

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: