Últimamente prefiero ver los toros en los libros, si no es en el campo abierto. Es un espectáculo lamentable lo que constantemente vemos en la televisión relacionado con el toro.
Intento buscar libros en la biblioteca que los niños puedan leer y en los que el toro sea protagonista.
El toro es un animal que impacta: su porte y tamaño nos avisan de su bravura. Transmite una fuerte presencia que sobrecoge. Tiene belleza.
Hay animales muy cercanos a nuestra cultura que apenas aparecen como protagonistas de historias. Animales que asoman poco por las páginas de los libros infantiles probablemente por no ser mansos, redondos y peludos que invoquen de manera inmediata a la ternura.
Parece que resulta complicado salir de los estereotipos conformados sobre la belleza presentada a los niños, o contar sin artificios la fiereza o bravura de un animal sin rozar los maniqueísmos.
Sin embargo, nos gustan los protagonistas excepcionales en los libros que habitualmente no cuentan con tanta simpatía del público y que son capaces, de la mano de un buen autor, de ofrecer historias bonitas para leer y pensar, de provocar una mirada diferente sacudida de prejuicios hacia el protagonista.
Hoy, vamos de toros. Y rescatamos de la biblioteca algunos libros que nos proporcionen un tiempo para repensar la relación entre el hombre y el toro en el siglo XXI.
Contar una historia sobre toros supone que en algún lugar te apriete el zapato, porque inevitablemente nos encontramos son su bravura, su tamaño, su habitual color negro, sus enormes cuernos y además para muchos, el fatal destino en fiestas populares o corridas de toros.
El asunto tiene miga y vamos a ver de qué modo lo presentan las publicaciones que hemos hallado.
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Ferdinando el toro
Munro Leaf
Ilustraciones y caligrafía de Werner Klemke
Editorial Lóguez, 1984
Munro Leaf escribió esta historia tan entrañable, y ya tan conocida, en 1936, en plena guerra civil española como un alegato a la paz.
Posteriormente, en 1966, Werner Klemke realizó las ilustraciones por las que recibió el Premio Manzana de Oro de la Bienal de Bratislava por la belleza plástica en su conjunto.
Realmente es un libro precioso y muy singular, todo un clásico: por la historia, la caligrafía a color y las peculiares ilustraciones como si fuesen bocetos con ceras de colores.
Será imposible que olvides el libro si pasa por tus manos y tu mirada.
Ferdinando es un toro grande y fuerte, pero en lugar de pasar el día dando topetazos, prefiere estar bajo una encina tranquilamente, o sentado oliendo flores. Su madre la vaca es comprensiva y le deja que sea feliz como a él le gusta.
El destino de muchos toros eran las corridas en la plaza y siempre los hombres elegían a los más fieros y bravos. Pensaron que Ferdinando era uno de los más temibles y se lo llevaron a la fiesta. Ese día todos se engalanaban y se divertían para ver cómo los banderilleros, picadores y toreros, ponían furioso al toro pinchándole con sus lanzas, puntas y espada, hasta darle muerte.
Pero Ferdinando se sentó en el centro de la arena de la plaza para disfrutar del fresco aroma de los claveles que llevaban las mujeres en el pelo, y no estaba dispuesto a luchar ni a embestir como una fiera. Así que no les quedó a todos más remedio que devolver el toro a su pueblo, y allí, bajo una encina, debe continuar tan tranquilo y feliz.
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- Otro libro para leer:
El toro fiel
Ernest Hemingway
Ilustraciones de Arcadio Lobato
Editorial Debate, Madrid 1985
El gran Hemingway escribió en 1951 esta amorosa historia, El toro fiel, y en 1982 la ilustró Arcadio Lobato. Encontraremos este libro solo en bibliotecas, si acaso se ha salvado de algún expurgo.
Es una historia escueta y clara en la que el autor trata con un gran respeto al toro. Valora su singularidad y su bravura transmitiendo de manera evidente la fuerza del animal. Mejor, no te acerques, no es un animal para acariciar o jugar.
Había una vez un toro al que le encantaba luchar, y luchaba con todos los demás toros de su misma edad o de cualquier otra y era el campeón. Sus cuernos eran tan resistentes como la madera dura y tan afilados como las púas de un puerco espín.
Luchaba siempre, pero no estaba enfadado ni era malvado.
Era un toro tan extraordinario, que decidieron no mandarle a morir al ruedo y le seleccionaron como semental. Cuando le llevaron a los pastizales donde estaban las vacas, se enamoró de una de ellas y solo quería estar con ella. Como esto no era lo que se esperaba de él, le enviaron al ruedo en una tarde de toros, donde murió con la espada de un matador, de un torero.
Es conocido el gusto de Hemingway por la tradicional fiesta de los toros que aparece en la historia de manera clara, sin entrar en juicios o muchos detalles, aunque los suficientes como para generar preguntas.
Ahora, con todos los ingredientes de la historia los lectores podemos cuestionar, hablar, contar, reflexionar, escuchar, opinar…
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- Una obra de teatro muy simbólica:
El Torito Negro
Antonio Ferres
Ilustraciones de Concha F. Montesinos
Editorial Gadir, Madrid, 2005
Antonio Ferrres, escritor español nacido en 1924 y perteneciente a la generación del 50, publica esta singular obra teatral infantil cargada de simbolismo y con reminiscencias lorquianas indudables.
La obra viene ilustrada por la sobrina del poeta, Concha Fernández Montesinos, con dibujos muy infantiles.
La historia se divide en cuatro cuadros en los que se detallan los escenarios, el diálogo de los actores y las acotaciones oportunas. Se desarrolla en un lugar del Sur.
Miguelillo tiene nueve años y ya quiere trabajar. Es inquieto y ya recogió en el invierno las aceitunas que caían al suelo con el vareo de los hombres, pero ahora, a pesar de que su madre quiere que juegue como niño que es, él se empeña en ir lejos a recoger espárragos, en los terrenos del señor Conde.
Allí se encontará con Torito Negro, que le habla y le invita a subir a su lomo sin miedo; le llevará hasta un lugar mágico llamado el país de las Mil Colinas.
Miguelito descubrirá con Torito el cuerno de la abundancia, los bandoleros buenos, a las gitanillas, los guardias y a la cachiporra de don Cristobita.
Una obra en donde se ponen en evidencia las relaciones humanas y en la que afortunadamente, el toro escapa de la muerte.
Torito
Ya te lo dije: a tí te matarán porque sabes dónde está el cuerno de la abundancia y mi fuerza; cosa que solo alcanzan a saber los que aman a los animales y a las cosas más nobles de la vida. Ya mí… a mí me pondrán banderillas de fuego, en la plaza de toros.
Una curiosa obrita de teatro.
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- Un poco de risas y otra mirada:
El traje de luces
Didier Lévy
Ilustraciones de Anna Laura Cantone
Editorial Faktoría K de libros, 2006
Esta es una historia con mucha dosis de humor y de ternura.
La plaza está hasta la bandera y con el corazón en un puño pues el torero espera en solitario en el ruedo a que el toro irrumpa en el coso.
Nadie sale. Los toros se han marchado pues no querían hacer daño a nadie ni que se lo hicieran a ellos. Allí solo se encuentra una cabra, un bicho con cuernos al fin y al cabo, a quien el torero convencerá para que salga a la plaza a hacer de toro.
El público decepcionado y cansado de esperar abandona el lugar. El torero y la cabra se marchan juntos y en su paseo, el primero decide tirar su capote y la espada.
Será entonces cuando una enorme sorpresa llenará de felicidad al torero.
La historia está llena de pinceladas humorísticas y especialmente destacamos el trabajo de la ilustradora, Anna Laura Cantone, por la perspectiva de las escenas poniéndose en la pupila del lector, por el gesto de los personajes, el uso estridente del color, las variadas técnicas plásticas que dan texturas y crean ambientes… todo el trabajo de ilustración en su conjunto le ponen levadura al humor, la tensión y la ternura que guarda la historia.
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Estas son las historias editadas que hemos encontrado con los toros como protagonistas.
Nos parece interesante darles oportunidad de lectura y de mirada, de ofrecer otras historias y mensajes relacionadas con el toro e intentar construir otros escenarios de relación con el toro más acordes con el humanismo del siglo XXI.
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Gracias por la reseña. Desde hace tiempo quiero llevar a cabo un proyecto que abarque la importancia de este animal desde la Prehistoria, sobre todo desde el punto de vista artístico y estos títulos son el complemento ideal. Un abrazo.
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Preciosa ésta entrada, Ana. Mucho para pensar con estos libros… A ver cuál encuentro. Gracias.
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